Invertir en arte, una buena opción

Invertir en arte, una buena opción

El arte es, para muchos, uno de los negocios que existen y a la vez una pasión. Par convertirse en coleccionista de arte se necesita seguir unas reglas esenciales.


Los especialistas comparan al arte con una inversión tan sólida como la inmobiliaria por sus características: no representa mayores dificultades de conservación, es fácil de trasladar y su comercialización es sencilla en el mercado nacional e internacional.

 

Por otra parte, están surgiendo listados de artistas,  tal como acciones en la bolsa o tipos de bancos según sus posibilidades de alza en el mercado. Por lo tanto comprar arte se convierte en una operación bursátil.

En la orilla opuesta a la comercial, están quienes adquieren una obra de arte  por disfrutarla en su contemplación, la magia de la obra en sí misma, son personas que consideran al arte como un acontecimiento en sí mismo. La obra de arte tiene la virtud de permanencia, se disfruta siempre que se desea y al mismo tiempo posee la ventaja de su eventual actualización como bien de venta.

Si va a comprar arte tenga en cuenta que:

- Establezca un criterio de colección.   Le permitirá crear una colección consistente agrupada por determinadas características. Este criterio puede ser una época determinada, un artista específico, un movimiento artístico, etc.

- Eduque su retina. Antes de comprar una obra de arte, debe entender lo que le gusta, lo que no le gusta y por qué.

 - Establezca un presupuesto. Si establece un presupuesto y se apega a él evitará pagar más de lo que puede.

- Sea un coleccionista responsable. Infórmese de la evolución y actividades de los artistas de su colección.